La dificultad para respirar es un precursor muy común y aterrador de un ataque al corazón si usted es una mujer. Puede llegar de repente sin previo aviso y sin motivo aparente. Imagine tratar de obtener un poco de aire como si hubiera acabado de subir corriendo varios tramos de escaleras cuando realmente está sentada inmóvil.

Muchas mujeres que sufren de un ataque al corazón presentan un sudor frío y húmedo, sin ningún estrés presente. El problema es que las mujeres a menudo confunden esta sudoración con las características típicas de la menopausia.

Las mujeres que han sufrido de un ataque cardíaco a menudo recuerdan despertar en medio de un profundo sueño con incapacidad para recuperar el aliento. Esta forma de apnea del sueño puede ocurrir durante un ataque al corazón.

Los ataques cardíacos dejan a las mujeres agotadas, sin energía, incluso cuando han estado obteniendo la cantidad de sueño y alimentación adecuada. Debido a su actitud de cuidar bien de los demás, pero no de sí mismas, obvian esta señal de alarma.

Desde hace 3 años el Centro Médico Julián Coronel se inspiró en la propuesta de la Asociación Americana del Corazón (AHA), que promueve vestirse de rojo, el primer viernes del mes de febrero, para concientizar a la mujer sobre su riesgo cardiovascular.

Nuestra meta es alcanzar la popularidad que tiene la campaña en otros países concientizando a la mujer vallecaucana, al ofrecer información que salve vidas, aumentando la investigación centrada en el género y educando a la comunidad.

Las señales de advertencia para las mujeres no son las mismas en los hombres. Los signos y síntomas de un infarto pueden ser más sutiles que en el hombre, y en ocasiones son ignorados por ella.

El 90% de las mujeres tiene uno o más factores de riesgo para desarrollar una enfermedad cardíaca.

La enfermedad cardíaca es la principal causa de muerte entre las mujeres. Aproximadamente una vida femenina se pierde cada minuto por enfermedades del corazón.

Los infartos atacan de manera muy diferente a los distintos géneros. Mientras que los hombres típicamente sufren de sofocantes dolores en el pecho, las mujeres sufren síntomas menos claros, los cuales por sus múltiples ocupaciones son desatendidos hasta que es demasiado tarde. 

Dolor agudo en la parte superior del cuerpo

Los ataques al corazón en las mujeres a menudo causan dolores agudos en la parte superior del cuerpo. Es común que las mujeres se quejen de un dolor agudo, similar a un disparo o un dolor punzante, el cual poco a poco sube hasta el cuello, los brazos o la mandíbula. 

Los latidos intensamente rápidos acompañan generalmente el sentimiento de intensa ansiedad y sudoración en las mujeres que están sufriendo de un ataque al corazón. Podría pensar que está teniendo un ataque de ansiedad, cuando en realidad es un ataque al corazón.

Mientras que los hombres pueden sentir “el peso de un elefante” sentado en su pecho durante un ataque al corazón, para las mujeres es menos intenso. En lugar de dolor, las mujeres sienten un malestar bastante fuerte que comúnmente se describe como una sensación terrible través de todo el pecho y no solamente en el lado izquierdo del mismo.

Dolor irradiado a la espalda sin causa clara, puede ser interpretado como un problema mecánico muscular o postural.

Desmayo y/o síntomas neurológicos como visión borrosa, pérdida de la fuerza en un lado del cuerpo, dificultad para hablar pueden ser indicadores de un evento coronario con repercusión en el sistema nervioso central.